Sebastián Almada es sin dudas uno de los humoristas más queridos de la golden era del humor en Argentina. Con su aparición en el ShowMatch de los años 90, el también músico, supo ganarse el cariño del público. Desde hace un tiempo, está completamente dedicado al teatro y este 1 de agosto presentará su nueva obra, Tertawa , en Paseo La Plaza, junto a Pachu Peña y José María Listorti.
Dejó todo por la vida
Sin embargo, en 2018 atravesó un momento crítico de salud y en una reciente entrevista se animó a contar cómo pudo superar su afección y la importancia de su familia en el proceso. Almada es papá de Lola y Joaquín, de 19 y 10 años, y junto a su esposa fueron las personas que lo acompañaron cuando estuvo en terapia intensiva por una bacteria. “No te das cuenta hasta que te dicen que es grave, ahí ya no importa el trabajo, la plata, nada, en lo único que pensás es en no dejar a tus hijos sin padre”, expresó Sebastián en diálogo con La Nación.
Jugado los pulmones
Luego, relató cómo vivió esa experiencia que, si bien fue un momento crucial en su vida, él elige no darle tanta relevancia: “Me han pasado cosas que fui llevando, siempre me apoyó mi mujer, que es mi mano derecha y trato de cuidarme, pero lo tomé como un episodio más. Así como estrené una obra de teatro, no le doy más trascendencia. La bacteria me afectó los pulmones y estuve un mes en terapia intensiva”.
Veo la vida con otros ojos
Por último, contó que desde aquel episodio trata de vivir la vida de otra manera y con mayor conciencia: “Cuando respiro al aire libre, pienso en qué lindo que es respirar, lo importante que es y te das cuenta que está bueno estar bien. No te importa el trabajo, la plata, nada. Solo pensás en la familia y en estar sano para seguir viéndolos”.
Sebastián Almada no solo ha dejado una huella en el mundo del humor, sino que también es un ejemplo de superación y resiliencia, demostrando que, a pesar de las adversidades, es posible encontrar una nueva perspectiva de vida y valorar lo realmente importante.
