En conmemoración del 101° aniversario del nacimiento del destacado médico y cardiocirujano René Favaloro, el conductor radial Darío Villarruel compartió una historia profundamente conmovedora que lo unió al doctor en uno de los momentos más dolorosos de su vida. En su programa “Pase lo que pase” de El Destape Radio, Villarruel recordó cómo conoció a Favaloro y cómo este encuentro marcó su vida para siempre.
No lo conoció como quería
Villarruel comenzó su relato manifestando un profundo “gran dolor” por la ausencia de Favaloro y, acto seguido, reveló cómo sus caminos se cruzaron en un momento crucial: “Lo conocí a Favaloro en circunstancias tristes para mí, porque mi papá murió en manos de Favaloro. Se descompuso mi viejo una vez en la radio municipal de aquel momento, estuvo internado y tenía un aneurisma en la aorta. Ahí apareció René Favaloro, porque lamentablemente había que operarlo a mi viejo sí o sí y el resultado podía ser muy negativo”.
Era médico y un maestro
El conductor continuó describiendo la dedicación y la empatía del doctor Favaloro: “Lo operó, nos contó y al otro día, después de la operación, nos explicó en un pizarrón, como un docente, lo que había hecho para ver si podían sellar esa aorta que estaba damnificada, y dijo ‘ya está operado su papá, hay que esperar 24 horas y rezar. Había una capilla en la Fundación Favaloro y ahí fuimos, a rezar”.
Se me fue mi amigo
A pesar de los esfuerzos de Favaloro, el padre de Villarruel no sobrevivió a la operación. Sin embargo, el conductor mostró gran emoción al recordar las palabras consoladoras del médico en medio del dolor por la pérdida: “Lamentablemente no hubo suerte y al rato vino, con todo el guardapolvo ensangrentado y con las manos recién secadas de haberse limpiado en el baño -lo tengo como imagen porque nos citó a los tres, a Claudio, a mí y a mi hermana Silvia- y mientras nosotros estábamos desesperados, él, con mucha tranquilidad, dijo ‘llorenlo como corresponde, fue un gran padre’. Y nos miró y nos dijo: ‘yo sé que a ustedes les duele mucho que su papá ya no esté con nosotros, pero saben lo que es para mí que se me vaya un amigo al que operé‘”.
Un médico con todas las letras
René Favaloro es reconocido mundialmente por haber desarrollado el bypass coronario, una operación que ha salvado innumerables vidas y lo ha convertido en una de las figuras más importantes en la historia de la medicina. Su legado perdura no solo en los avances médicos que impulsó, sino también en las innumerables vidas que tocó con su humanidad y dedicación. Favaloro falleció el 29 de julio del año 2000, dejando un vacío inmenso tanto en el ámbito médico como en los corazones de aquellos que lo conocieron.
La historia compartida por Darío Villarruel es un testimonio más de la grandeza de René Favaloro, no solo como médico, sino como ser humano, y sirve como un recordatorio conmovedor de su legado imperecedero.
