En las últimas horas, la farándula se ha visto impactada por el relato de Barbie Vélez sobre un accidente que sufrió su hijo Salvador. La actriz y modelo compartió detalles íntimos del incidente en el que su pequeño tuvo que ser intervenido quirúrgicamente, describiendo la experiencia como “bastante heavy”.
Desde que Barbie Vélez se convirtió en madre, ha utilizado sus redes sociales para documentar las travesuras y el crecimiento de Salvador, su hijo de un año y medio. A través de sus publicaciones, los seguidores han sido testigos de las experiencias diarias de la actriz y las divertidas ocurrencias de su bebé. Sin embargo, hace unos días, el ambiente festivo se vio interrumpido por un accidente que llevó al pequeño a necesitar atención médica.
Una semana para el olvido
Barbie relató que Salvador, conocido por su energía y curiosidad, sufrió una caída que le provocó una herida en la frente. “Tienen brotes de crecimiento, en este momento Salvi está hablando un montón. Está mega activo, trepándose de todos lados. De hecho, les tengo que contar lo que nos pasó la semana pasada”, explicó Vélez.
Sus primeros puntos
El incidente obligó a la familia a llevar a Salvador a la guardia para recibir tratamiento. Barbie compartió los detalles de la experiencia: “Vieron que le decía que no para un segundo. Que está bien, es lógico de la edad. Se cayó, se lastimó y le tuvimos que hacer unos puntos. Fue bastante heavy para nosotros”. A pesar de la preocupación y el estrés que vivieron, el equipo médico brindó un cuidado excelente. “Fuimos a la guardia, obviamente. Por suerte nos tocó una pediatra y una cirujana plástica que fueron un amor. Fue un toque, le dieron la inyección de la anestesia y le hicieron dos puntos”.
Él bien y nosotros los preocupados
A pesar del impacto emocional que el incidente tuvo en sus padres, Salvador demostró una notable fortaleza y resiliencia durante el proceso. “Pero la verdad es que después de eso estuvo bárbaro. No se quejaba, es un sol. Fue más traumático para nosotros que para él. Pero ya está bien”, concluyó Barbie.
Este relato no solo muestra la capacidad de los niños para recuperarse de situaciones difíciles, sino también la dedicación de los padres para garantizar el mejor cuidado posible para sus hijos en momentos críticos. La experiencia, aunque dura, resalta el amor y la fortaleza de la familia Vélez-Rodríguez frente a los desafíos que presenta la crianza.